miércoles, 19 de febrero de 2014

La Censura II

Los aires libertarios

 

A veces es muy difícil separarse de esa revolución que una lleva en el vientre; porque no es otro sitio de nuestro cuerpo donde repercuten las mayores emociones, sean positivas y placenteras o todo lo contrario. Leer y publicar el artículo de Dharma dio pie a que luego, en #sotano de Mazmorra.com.ar, se debatiese el tema. ¿Cuál tema? Uno que venía arrastrándose desde un hilo del Foro con respecto a las “bajas” sufridas en el listado del portal.

Equilibrio sin verga

La verga del balancín que llevan los equilibristas del cable con sus dos manos para mantenerse en la vertical. No otro tipo de verga, como podría ser la de las velas cuadras en sus respectivos mástiles.

Es difícil pero no imposible adaptarse a vivir en comunidad. Los individualistas –que habitualmente terminan saludando con la diestra en alto y los dedos de la mano pegados entre sí- sufren más la adaptación.

Yo lo compro, yo lo presto pero es mío

Un poco como en el arenero y los juguetes. Es así un chat. Alguien –o algunos en el mejor de los casos aunque no sé si mejor- decide que es posible subir un portal a Internet que contenga un chat, probablemente de Java.

Averigua ofertas, condiciones y se decide. Saca de su alcancía los billetes verdes que le piden el host o los nacionales si es ídem, brinda sus datos personales, acepta la cuestión jurídica en caso de despelotes ulteriores por demandas y esas cosas y… ¡ya está!

Y ahora qué se hace

Se ubica a un diseñador o lo diseña el propio contratante, de ahora en más dueño del lugar –o Editor o Editor responsable o Capo o lo que sea- y mientras van surgiendo en la pantalla los bocetos de las secciones que tendrá el novel portal, también se le ocurren las normas o reglas que habrá de tener.

Un portal, por lo tanto, sea periodístico o no, con sus reglas es como tener una línea editorial. El Editor resolverá si abre su espacio a todos, a menos o a pocos. Teniendo en cuenta que todos tendrán, como base, la misma volición o vocación. En nuestro caso el BDSM.

Más fácil que un medio de prensa

Claro que sí. Al estar circunscriptos a la temática BDSM se supone que no habrá controversias acerca de cuestiones políticas de ninguna índole, salvo las políticas del propio BDSM.

A veces se plantean debates interesantes o bobos, según quiénes participen, claro está, sobre temas de la política nacional. De todos modos, aunque suenan agresivos en algunos casos, sirven para desnudar inclinaciones, conocimientos o ignorancias. Son saludables.

Pero volviendo al tema de la libertad de expresión, todos podemos, entro de un portal como Mazmorra, expresar lo que nos venga en gana, siempre que al hacerlo estemos de acuerdo con la “constitución” del lugar, o sean las reglas pre-establecidas y que aceptamos al estar inscriptos allí.

Lo que esté fuera de ese límite o no será publicado o lo que fuere que las reglas pre-establecidas prevean.

Pero una cosa son las reglas y otra el autoritarismo miope

Aún en los sitios como Mazmorra, las reglas de convivencia social se deben de mantener a ultranza. Es cierto que la tentación totalitaria es como un huracán sorpresivo que sopla de golpe pretendiendo que nos dejemos llevar. Pero es el intelecto que da base a la razón el que impedirá que seamos como ovejitas mansas de un soplido absurdo.

No creo que sea ni siquiera práctico ver a “el Otro” que nos contradice o nos demuestra que estamos equivocadas, como un “enemigo”. Menos aún debería de no caer en esa trampa quien es el responsable máximo de un sitio como Mazmorra y, de tal suerte, instruir a sus acólitos a actuar del mismo modo. ¿Cómo?

Progresivamente. Una advertencia, dos, tres. Pero no advertencias del tipo “ojo porque te echo” sino tomándose la cosa en serio y explicándole al supuesto “infractor” cuestiones lógicas que habrá, el advertido, entender rápidamente.

Lo demás, o sea, el abuso de autoridad, la destemplanza, la insolencia o el descaro no forman parte del vocabulario armónico de un portal ni, menos, de quien es el responsable máximo del mismo. Porque también se puede dar que acólitos y seguidores de grado menor, cometan infamias como las aludidas y se deje pasar la cuestión sólo por esa cercanía en el gobierno de un lugar. No tendría que ser así.

Libertad de expresión y de publicación

Cuando una nota, un artículo o lo que fuere, no se publica en un medio de prensa, es el secretario de redacción o el propio editor de tal sección o el editor en jefe quien explica las razones por las cuales ese artículo no será publicado. No se lo manda al basurero sin explicación ni razón manifiesta.

Lo mismo ha de suceder y concretarse en el Foro de Mazmorra. Explicar al autor que tal nota no va por esto y lo otro. Pero NO porque “no se me canta”. Esa razón sirve para los patoteros de la esquina donde cobran peaje a los débiles y se callan la boca cuando pasa un forzudo malo.

Quien escribe algo para que se lo lean, también tiene una cuota de razonamiento “libre” para entender las razones de “el Otro” que es, a la sazón, el dueño del espacio donde publicará sus letras.

Los intereses

De eso se trata también. Como lo vemos a diario en los diarios. No se publican noticias ni estadísticas ni constataciones ni nada que tenga que ver con supermercados delincuentes porque de esos supermercados reciben cuantiosas pautas publicitarias.

El mismo caso aunque en menor proporción –obvio- se da en Mazmorra.

Cuando funcionaba Deviant era lógico que no se promocionaran otras reuniones en otros lugares que no fuesen en el propio local de Mazmorra.

Ahora que cerró, habría que preguntarle al responsable del portal si es lícito promocionar reuniones en otros sitios. Todo es conversable. De pronto Mazmorra puede obtener algún tipo de canje por publicar o promocionar reuniones BDSM en otros sitios. No sé. Pero no se impone nada dentro de un ámbito que si no es comercial está muy cerca de serlo –necesariamente, agrego-.

Los exabruptos

Nos hacen mal a todos. Y por ellos, insensatos y abusivos, nos vemos privados de leer y compartir con personas a las que queremos de años y que siempre han aportado dinámica, creatividad, humor… para romper el tedio del tratamiento supuestamente SM que empaca a los novatos y protege a los viejos.

Tendamos la mesa, mantel de hilo blanco y conversemos. Porque si bien es cierto que se van muchos –piden la baja de sus perfiles-, también hubo muchos que llegaron en estos dos meses.

Charlemos, que de eso se trata un “chat”.

 

Gracias por leerme y disculpen la falta de síntesis.

 

Soledad FABsanta_fulana

"L'Equip"

1 comentario:

  1. santa fulana, excelente su comentario, coincido con ud en cada una de sus expresiones, si asi se hiciera,no habría hijos, ni entenados. :)

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